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Gente del Parque

Entrevista con Arabel Sánchez

 

Entrevista con Arabel Sánchez el día 22 de abril 2009 en Almería.

¿Te acuerdas la primera vez que viniste al Cabo de Gata?
Si, fue hace 14 años, de vacaciones en agosto, venía una semana con el que era mi novio entonces, y fuimos a Las Negras, a un apartamento. Recuerdo el desvío de Campohermoso y empezar a meternos entre montes e ir avanzando, avanzando y de repente ver un trocito de mar y seguir avanzando y encontrarme dentro de un pueblecito, pequeñito, pequeñito… Tan pequeñito que no tenías la sensación de llegar hasta que estabas dentro. Y esta sensación de llegar hasta Las Negras es algo que me impresionó muchísimo.

¿Donde vivías en ese momento?
En Madrid. Todavía estaba estudiando, terminando la carrera de Arquitectura. Desde entonces todos los veranos regresé aquí, al Cabo de Gata, no volví a irme de vacaciones a ningún otro sitio.

¿Y desde cuándo vives en Almería?
Desde hace 4 años. Bueno, ya llevaba 10 años viniendo de vacaciones, y no sólo en vacaciones, también cuando tenía un puente o cualquier momento libre, un fin de semana, lo que fuera, aprovechaba para venirme al Cabo.


 

¿Y siempre a Las Negras?
No, eso fue cambiando. Porque mi vida a lo largo de diez años también cambió mucho.  Primero venía a Las Negras, alquilando un apartamento, luego empecé a ir al Camping de La Cala del Cuervo, para no pagar el alquiler un año que subieron mucho y porque así estaba más en contacto con la naturaleza, y al final, venía directamente a dormir a las playas. Me podía a pasar una semana entera en las calas del Barronal o en la cala de Enmedio. Y hubo un momento en que me di cuenta de que, aunque vivía en Madrid, realmente mi alma estaba aquí. Y entonces pensé que tenía que venirme, tenía que cambiar de sitio para estar donde me encontraba a gusto. Así que pedí el traslado a Almería, me lo dieron y me vine.

¿En qué trabajas?
Soy profesora, tenía mi plaza fija allí en Madrid, pero en mi trabajo existe la posibilidad de cambiar.

¿Profesora de qué?
De instituto, profesora de tecnología. Me dieron el traslado y me vine a conocer la ciudad de Almería.

Foto: Arabel, © LF
 

¿Desde cuándo colaboras con la Asociación Amigos del Parque?
Tomé contacto con Amigos del Parque hace ya muchos años a través del ECO del  Parque, sabía que existía y me parecía una asociación muy interesante, pero no fue hasta que llegué aquí cuando decidí que tenía que apuntarme.

Entonces pasé un tiempo intentando encontrarla porque no había forma. A través de la web mandé correos y cosas para ver si me querían, pero no había manera. Al final en una manifestación que hubo en contra de El Algarrobico pregunté directamente a la gente que llevaba camiseta de la asociación y les dije: quiero estar con vosotros. Y a partir de ahí llevo cuatro años colaborando con la asociación.

¿En qué consiste tu colaboración?
Aunque trabajo como profesora, mi carrera es Arquitectura, por lo que mis conocimientos técnicos me permiten encargarme de toda la parte que tenga que ver con planimetría, con localizar cosas sobre el terreno, hacer dibujos, ampliaciones y reducciones de planos, comprobaciones de que las cosas están en su sitio, también algunas interpretaciones de las leyes. En eso es fundamentalmente en lo que colaboro.

El último trabajo que has hecho era colaborar en la demanda del PORN (Plan de Ordenación de Recursos Naturales), sin entrar en detalles, ¿tienes una opinión general referente a esta actuación de la Asociación?
Creo que es importante que se siga dando la cara en los aspectos jurídicos, porque es la única manera de, si no corregir lo que se ha hecho hasta ahora, por lo menos evitar que se vuelva a repetir.

Creo que esta demanda es muy importante con consecuencias bastante serias para el Parque y para toda le gente que vive en él. Tiene como objetivo el decir que no nos vamos a conformar con que hagan con el Parque lo que quieran y que, independientemente de lo que se consiga o no con ella, estamos allí dispuestos a dar la cara. Así que es básico.
Creo que va a ser bastante decisivo lo que ocurra con la demanda, pero sobre todo es un buen indicativo de que estamos ahí, de que hay gente que se preocupa y de que no se va a permitir campar a sus anchas a los que en un momento dado hacen y aplican las leyes un poco a su antojo.

¿Para ti, cuál es la amenaza más grande para el Parque?
La amenaza más grande al Parque... creo que hay varias cosas. Primero es la infravaloración que tiene el Parque por parte de los habitantes de Almería en general. Y creo que eso es peligroso porque cuando alguien tiene algo cerca y no lo valora, tampoco le da importancia y permite que se destruya porque cree que no tiene ningún valor. Eso  creo que es básico.

¿Con qué tiene que ver esto?
Creo que tiene que ver con la historia de la propia Almería, con el alejamiento que ha tenido siempre del  Parque, con un malentendido progreso identificado siempre con la construcción y con cosas como los invernaderos, elementos que en un momento dado han servido para hacer mucho dinero, pero que no son sostenibles a largo plazo y tampoco traen bienestar y calidad de vida.

Otro peligro es la desconexión entre la realidad del  Parque y la normativa que rige sobre él, que hace difícil la vida cotidiana de los habitantes de los pueblos del Cabo y a la vez permite que sea degradado por otros agentes más poderosos y destructivos.
Se debería encontrar la manera de permitir una explotación y desarrollo compatible con la naturaleza y la preservación de los valores del Cabo a sus moradores, que además están ligados a su carácter, pero con algo más de imaginación que la mera compra de terrenos por parte de la Administración y restringir radicalmente la explotación por parte de promotoras y empresas para quienes el Parque sólo representa un lugar donde invertir y lucrarse aún a costa de su destrucción.

Aquí está tu niña con nosotras, ¿cuántos años tiene?
Tiene un añito y tres meses.
Pero te voy a contar más cosas de mi relación con el Parque... te contaba al principio que la primera vez que vine me quedé impresionada con la entrada de Las Negras y según fui viniendo más veces he tenido en el  Parque momentos igual de sublimes, que han ido construyendo esa relación tan especial que tengo con él. Es casi como un enamoramiento, pasión primero y después la consolidación del amor a lo largo de tiempo.

Recuerdo por ejemplo una noche de tormenta en la cala del Cuervo con las olas rompiendo en el acantilado hasta casi llegar al castillo, que fue un momento mágico.

Y otra noche en el Barronal, una noche de Semana Santa, cuando la luna empezó a salir por el medio del mar, una luna roja inmensa, inmensa…
Son momentos que tengo apuntados como esos instantes maravillosos de mi vida que realmente merecen la pena.

Y luego he tenido también experiencias negativas, como una vez que me picó un alacrán, también en la cala del Barronal por estar durmiendo en ella.

Y cada rinconcito en cada playa del  Parque lo tengo asociado a una experiencia vital mía y eso hace que cuando veo los destrozos que se hacen… Por ejemplo, cuando vi por primera vez la rotonda de Las Negras, esa que han hecho a la entrada con el desmonte del molino y el centro comercial, me tiré dos días llorando. Porque habían destruido algo que estaba ligado a mi pasado y a mi ser.

Y es que es una relación… incluso creo que demasiado visceral, muy íntima, muy sentimental, no es objetiva a veces, no es decir lo han dejado mejor o peor, sino ¡Me han hecho algo a mí!

Creo que eso pasa a muchos de nosotros que hemos decidido que allí queremos vivir... es una decisión muchas veces muy emocional...
...Yo leí una vez que uno ama el paisaje que comprende y al que está acostumbrado. Se supone que siempre tenemos una especie de relación fuerte con el paisaje de nuestra niñez, con el paisaje de nuestros abuelos, por ejemplo. Sin embargo yo, cuando llegué al  Parque, tuve la sensación que ese era mi paisaje, que esa aridez, ese contraste de las luces, las sombras, las rocas, esa dureza. Eso era lo que yo estaba buscando desde siempre. Es una identificación, y me pasa cada vez que voy, porque para ir al  Parque, tengo que hacer el camino desde aquí, desde Almería, pero es empezar a ver las pitas, ver el perfil de Cabo de Gata, ver las plantas y el mar y de repente notar que perteneces a un sitio, una sensación curiosa.

He visitado tu página web y allí se ve que eres una persona muy creativa, haces muchas cosas diferentes...
... bueno, creo que la creatividad es algo innato a los seres humanos, todos lo hacemos de alguna manera, hay quien cuenta chistes, quien toca la guitarra y quién es un artista peinándose… En mi caso me decanto por la escritura y la expresión gráfica, pintura, fotografía, montajes… porque son los ámbitos en los que me resulta más fácil expresarme. Imagino que tiene que ver con la necesidad de interpretar la realidad para poder asumirla a veces.

Entrevista realizada por Lisa Frohn
www.cabodegatalife.com

La web de Arabel:
www.araweb.org