Home
El Eco
Noticias
Juridico
Senderismo
Conocer
Planos y mapas
La Asociacion
Estatutos
Enlaces
Contacto
Casas rurales, hoteles, cortijos,
y otros servicios
en el Parque

Visita nuestros Patrocinadores
  Camisetas de la Asociación
Diferentes tallas, modelos y colores
Descúbrelas
y cómpralas
 
Síguenos en

Sitemap

Aviso legal
Política de cookies
Política de privacidad

Webdesign: espacioazul.net

 
 
 
 

Los Juguetes del Desván

 

Exposición en Casa-Museo El Portillo

Subir al desván suponía, para muchos de nosotros, descubrir mundos nuevos. Hallar objetos ocultos, tal vez misterios. Envolvernos en una aureola de otras épocas y hasta de otras vidas. Transformar nuestro entorno cotidiano en algo distinto, inspirándonos en leyendas y cuentos, disfrazándonos, mirándonos en un espejo sucio y abandonado cómo nos quedaba aquel viejo sombrero, aquel raído abrigo o aquel chal de la abuela.

Nos sorprendía aquella pequeña pieza de madera que, envuelta en una cuerda al tirar de ella, giraba dando vueltas sobre el suelo. Luego nuestros padres nos explicaban que se llamaba peonza o trompo. Pasábamos horas jugando a las canicas, a las chapas… y sobre todo, nos asombraban aquellas muñecas de porcelana y celuloide que nos miraban fijamente a los ojos, a veces causándonos ternura y otras, verdadero pánico.

Los juguetes del desván parecían tener vida propia o eso imaginábamos nosotros; como si quedara en ellos algo de la magia de los juegos infantiles, de las risas, de las voces, del alboroto, de los ecos del pasado.

Los hallazgos arqueológicos sitúan los primeros juguetes en Mesopotamia. Hace más de cinco milenios, los niños babilonios ya utilizaban las tabas para sus juegos, que no eran más que huesos de corderos o de animales rumiantes. Esos rudimentarios juguetes fueron evolucionando con el devenir de los tiempos. Las muñecas grecorromanas elaboradas con barro, madera, marfil o hueso se iban transfigurando en otras que utilizaban diferentes materiales. La Edad Media marcó un antes y un después en el mundo del juguete. Las muñecas de las familias pobres seguían siendo de trapo o madera, pero la aristocracia también hizo del juego un lujo, creándose piezas únicas con fastuosos vestidos e introduciendo el vidrio como material para los ojos de las muñecas.

Después llegarían los sofisticados muñecos articulados, las delicadas piezas de porcelana en miniatura y todos aquellos juguetes que se utilizan para los juegos de imitación: cocinas, coches, cunas, armarios, disfraces, costureros y hasta armas.

 
© Jordi Garriga

La exposición Los Juguetes del Desván que se inaugurará el viernes 12 de diciembre a las 19 horas en la Casa-Museo El Portillo de Níjar, organizada por la Asociación Tierra y Cultura Cabo de Gata-Níjar, se podrá ver hasta final de Semana Santa y nos introducirá en la nostalgia de los juegos del pasado y en el reflejo de la sociedad que nos antecedió. Durante el acto, podremos asistir a un cuenta-cuentos teatralidad.

La Asociación Tierra y Cultura Cabo de Gata-Níjar agradece la colaboración de todas aquellas personas implicadas en esta exposición y muy especialmente a aquellas que nos han cedido sus juegos y juguetes.

Mª José S. Gázquez
Asociación Tierra y Cultura Cabo de Gata-Níjar